Muchos desconocen el proceso de invernar la piscina. Aunque en nuestra zona, en la Costa Blanca, las temperaturas en invierno no son muy bajas, se puede también invernar la piscina.

Lo más recomendable es cubrirla con una cobertor de invierno. De esta manera se asegura que no caiga suciedad a la piscina. Se ahorra agua al no haber evaporación, se elimina la necesidad de añadir productos químicos de mantenimiento y también se ahorra electricidad, porque se reducen las horas de filtración al mínimo.

Los cobertores de invierno cubren toda la piscina y se anclan al borde de esta o a la playa, así no hay posibilidad de que entre ni la luz ni la suciedad. Están fabricados en poliéster reforzado con PVC.

Un complemento al cobertor de invierno o independientemente a instalar un cobertor, es la adición de productos químicos específicos para invernar la piscina.

Se recomienda empezar el tratamiento una vez la temperatura del agua esté por debajo de 15ºC. Ajustar el nivel de cloro y pH y luego seguir las instrucciones del fabricante. Son muy fáciles de aplicar y con este proceso se ahorra en productos químicos.

Durante el invierno, la piscina permanecerá limpia y libre de algas.

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